Por qué YO
Soy Mercedes Arcos, me sitúo hace 7 años. Mujer de 36 años, con su carrera terminada y un buen trabajo en una multinacional, casada con dos hijos y viviendo en una gran ciudad. Detrás de este perfil cualquiera que se identifique puede descubrir a una mujer con mucho estrés, con intención de llegar a todo, grandes expectativas con sus hijos, agotada y en el mejor de los casos con discusiones de pareja para llevar el día a día . (trabajo, niños, extraescolares, comidas, ropas, facturas, vida social…)
No estaba convencida con el ritmo ni el estilo de vida que llevaba siempre había querido tener mas hijos pero lo veía muy complicado. Necesitábamos un cambio de ritmo, el día día nos devoraba la horas, los meses y los años, los niños crecían y nosotros sobrevivíamos. Decidimos que contra todo pronostico queríamos ampliar la familia. Puff visto desde los ojos de esa mujer con dos hijos y con tantas tareas podía ser el remate, porque si no llegaba con 2 donde iba con 3. Pero no hay nada como dejar de racionalizar y hacer lo que te dice tu corazón. Este tercer hijo nos empezó a recolocar a todos, la vida no da puntada sin hilo y hay momentos en los que solo hay que mirar de otra manera para ver lo que la vida te esta gritando.
Cuando me incorporé a trabajar después de mi tercera baja por maternidad, me plantee algo que no me había planteado nunca ¿voy a pasarme el resto de mi vida haciendo lo que hago en la empresa en la que trabajo? Me siento realizada con lo que hago?, me dí cuenta que no, que aun me quedaba prácticamente la mitad de mi vida, no quería seguir haciendo lo que estaba haciendo hasta mi jubilación, necesitaba hacer algo que me llenara.
Por primera vez después de 37 años me paré a pensar cual era mi verdadera vocación, en que soy buena, qué quería ser de mayor cuando era niña… rescaté ese deseo y sentí como me iluminaba por dentro y por fuera, de pequeña quería ser misionera y peluquera (en definitiva quería ayudar, darme a los demás y además ofrecerles su mejor versión …)
Decidí que quería volver a estudiar y titularme en algo que me permitiera ayudar de forma oficial y trabajar haciendo lo que realmente amaba. Otra locura! Con dos hijos de 9 y 7 años y un bebe meterme en esto… pero seguí adelante, estaba tomando acción en mi vida y escuchando a mi corazón.
Decidí formarme como coach, certificarme oficialmente y empezar a poner al servicio de los demás un gran don del que fui consciente cuando empecé a tomar acción a mi vida, LA ESCUCHA. Quería ayudar a conseguir esa claridad que todos necesitamos para avanzar y sentirnos en paz en nuestro día a día pero esta paz también la quería para mi y para mi familia, en especial para mi matrimonio y mis hijos.
A partir de este momento no dejé de trabajar en mi proyecto personal, me certifiqué como coach ejecutivo, coach de equipos, como mentora y tuve otro hijo más, Además descubrí que el AMOR era el valor mas importante en mi vida y era el motor para que todo funcionara.
Durante todo este tiempo he compaginado mi trabajo, el coaching y mi vida personal, mi marido y mis 4 hijos.
Un objetivo constante al certificarme además de ayudar en el desarrollo personal a decenas de personas , ha sido conseguir herramientas para ayudar a mis hijos y tener una buena relación con mi marido, es verdad que tenía muchas herramientas para gestionar de otra manera las cosas en casa pero era todo teoría, nos tropezábamos muchas veces y nos costaba ver con claridad la mejor manera de acompañar a nuestros hijos, me di cuenta que desde el AMOR las piezas empiezaban a encajar. La vida nos regalo el mejor aprendizaje para esto. Vivir la paternidad de adolescentes y niños pequeños en paralelo, es como ir al futuro y volver, como si la vida te permitiera ver por una mirilla las consecuencias buenas y malas de lo que haces personalmente, con tu pareja y con tus hijos y ver como todo esto repercute directamente en ellos tanto para bien como para mal.
Con mi experiencia como madre de 4 hijos, pareja desde hace 23, mi experiencia en el desarrollo personal de madres y padres de familia y mi formación. He creado un programa “remamos juntos” con el objetivo de ayudar a familias a que empiecen o vuelvan a disfrutar en familia dejando atrás pensamientos como “ no puedo mas” , “ estoy mejor solo que mal acompañado”, “ si no hubiéramos tenido hijos”, “al final lo mejor es que nos separemos”…..